TENDENCIAS
DE LAS ENERGIAS RENOVABLES, LOS PRO Y CONTRAS.
Tanto en las universidades como en los
diferentes fórum científicos se sostienen argumentos a favor y en contra de las energías
renovables frente a los recientes avances de la ciencia. Me permito analizar
algunos y desde luego es un tema de análisis.
CASO
1: Son una fuente insignificante: A pesar
de años de subsidios, el viento es fuente del 5% de la generación y 4% de la
producción de electricidad en los EE.UU. Esto significa la décima parte de lo
que se produce con carbón. Sin embargo, si se combina todos los renovables
(hidro, geo termal, biomasa, solar y viento), se tiene el 14% de la producción
nacional frente a los 19% que produce la energía nuclear. Pero recordemos que
EE.UU. tiene el segundo sistema eléctrico a nivel mundial, genera el 20% de la
energía del planeta. La generación eólica de EE.UU. significa mayor generación
que lo que genera Australia, Arabia Saudita o México. Equivale a la mitad de la
generación de Francia o Brasil.
CASO
2: Pueden reemplazar a los hidrocarburos fósiles: El National Renewable Energy
Laboratory ha realizado un estudio que encuentra que para el año 2050 el 80% de
la energía de los EE.UU. podría ser provista por renovables. El problema es el
costo de capital inicial, la inversión en líneas de transmisión (duplicar las
existentes) y encontrar la locación adecuada.
CASO
3: Son una fuente muy cara: Un
reciente estudio en el Journal of Environmental Studies and Sciences,
concluye que el costo de generación del carbón es de 3 centavos (cvts) el
kilowatt-hora (kw-h), las nuevas plantas a gas generan a 6.2 ctvs; las eólicas
a 8 ctvs y las fotovoltaicas a 13.3 ctvs. Pero, si incorporamos los costos para
la sociedad de la contaminación por generación (problemas de salud, emisión de
CO2) el carbón costaría 9 centavos (en una planta nueva a carbón el
kw-h costaría 13.2 centavos) y el gas 7.5 ctvs. Mientras tanto se vienen
descubriendo nuevas tecnologías que abaratan tanto la generación fotovoltaica
como eólica. El Departamento de Energía ha determinado que el costo promedio
nacional de la eólica es 4ctvs (llega a 2 ctvs en algunas regiones).
CASO
4: La variabilidad como maldición: El sol no siempre brilla y el viento no siempre
sopla en un sitio en particular. La forma de abatir este obstáculo no es pensar
en una planta aislada sino en un conjunto de “granjas” esparcidas por el
territorio. Esto reduce el riesgo de la volatilidad solar o eólica. Lo costoso
es el sistema de líneas de transmisión. En Texas, estado de la Unión con el
mayor mercado de electricidad, construyeron 2,600 millas de líneas de
transmisión y aseguraron que el 10% de la oferta en el mercado sea eólica (con
un 96% de eficiencia).
CASO
5: El gas natural es su peor enemigo: La abundancia del gas esquisto ha cambiado el
mercado de electricidad. La generación a gas se incrementó en 34% en el período
2009-2012. La generación eólica aumentó en 92% en el mismo período y la
generación fotovoltaica se multiplicó por cuatro. La generación a gas es más
barata y la generación eólica no podría competir sin subsidios. Sin embargo, si
observamos las tendencias se podrida pensar en una complementariedad entre las
dos tecnologías. En el corto plazo, el gas gana pero a largo plazo, la
volatilidad del precios del gas (el sol y el aire son costo cero) nos hace
pensar en complementariedad en un balanceado portafolio de generación.
CASO
6: Significa millones de “empleos verdes”: La administración Obama prometió millones de
empleos “verdes”. El problema radica en la definición amplia de lo que es un
empleo “verde”. Bajo esta definición, en los EE.UU. se tienen 3.4 millones de
empleos “verdes” en el 2011. Una mejor idea nos lo dan el empleo directo de
cada sector en el 2012: la industria eólica es de 81,000, de la fotovoltaica
119,000; la geotermal 20,000 y la hidro-eléctricas reconoce entre 200,000
and 300,000. Lo cierto es que los números no han cambiado desde el 2008 de
manera significativa.
Antes de ser tan generosos de venderle
gas a Chile, pensemos en nuestra matriz energética. El Perú con reservas tan
generosas que ya cualquier país en el mundo quisiera tener, no puede darse el
lujo de “VENDER” nuestro gas, cuando el país lo requiere y sobre todo es nuestra reserva para las futuras
generaciones. Ing° Manuel Urcia Cruz.